En El mundo sigue (Fernando Fernán-Gómez, 1963) Agustín González interpreta un riguroso crítico teatral que trabaja para un periódico. Un día, el director lo llama a su despacho y le dice:
"-Hombre, no puede escribir siempre críticas tan negativas. Los autores se nos quejan. Haga como Fontanilla, el crítico de cine. Va a todos los estrenos con una gachí diferente y todas las películas le parecen buenísimas."
El cine español es proclive a las películas malditas. Casi como todas las cinematografías. El mundo sigue sufrió los estragos de la censura (a mí me sorprende que se haya llegado a filmar), no llegó a estrenarse y, aun hoy, es muy difícil tener acceso a ella. Por supuesto, no hay descargas disponibles en Internet. No encontré ni fotogramas. Estos los busqué en la red y en las bibliotecas.
Yo la vi en la Filmoteca de Catalunya en el 2004 o 2005 en un ciclo que se llamaba "El melodrama o la vida és un plor", de eso me acuerdo.
El IMDb está equivocado. Es cosecha 1963, un año antes de otra película maldita, pero menos, El extraño viaje.
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3 comentarios:
Madre mía, Ramiro. Como siempre, me dejas sin palabras. Sabes demasiado de cine. Y si realmente tú no has encontrado la película, llego a preguntarme si existe.
¿Dura? Te quejas de vicio; como buen porteño, hablas por hablar. Reconócelo: vives a cuerpo de rey (menos cuando Angelita te reclama como camarero, yo necesito encontrar lo imposible o tienes que traducir al latinoamericano un manual de instrucciones de 325 páginas sobre las 1000 y una maneras de coser un botón )
Mó, varias cosas: no soy porteño, no soy porteño y no soy porteño.
El título del post es i-r-ó-n-i-c-o.
Finalmente, no se lo digan a nadia, yo he venido a esta vida a veranear.
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